
Seguro que no es necesario que te contemos lo que es, pero, por si acaso, te decimos que es como una hucha enorme en la que varios jugadores ―a veces incluso millones― van depositando dinero hasta que llega uno con mucha suerte y se lo lleva todo. Ha habido slots, como Mega Moolah, que han repartido millones de la noche a la mañana.